viernes, 22 de agosto de 2014

Sobre lo normal, la educación y el libre pensamiento.

Y es que nacimos filósofos. Y es que corríamos entre pensamientos como entre pasillos, pero en ellos dejamos de serlo. Y yo me paro a pensar ¿Qué será de nosotros?

Y es que lo normal es aquello a lo que nosotros estamos acostumbrados, porque nos hemos ido acomodando en el transcurso del tiempo, pero no significa que sea lo mejor para nosotros. Desde pequeños hemos crecido con una serie de normas, sistemas, comportamientos, que nos han hecho ver la vida como nos figuramos que debe de ser. Y para eso está la originalidad que nos dio la naturaleza del ser humano, la búsqueda de soluciones a algo que para otros parece normal. También existe la diversidad de opiniones, que nos permite sacar conclusiones a lo largo del debate. Pues bien: ¿Os imagináis un mundo en el que la educación fuese una manera de enseñar a pensar en vez de imponer, como lo hicieron nuestros antecedentes?

En realidad no hace falta irse a otro mundo, porque en este mismo hay bastante gente que se figura un cambio en el sistema educativo. El anhelo a la creatividad y al libre pensamiento. Con esto no quiero decir que yo tenga la razón, porque la razón es visible por muchos aspectos. Hay cosas en la educación que, aparte de que me parezcan "normales", también debido a que me crié con ellas, me parecen bien, pero si fuerzas una educación que no permite un libre pensamiento, sabes que todo un desarrollo se encuentra en vías de extinción.

Y seguramente cueste establecer un sistema educativo para un numero tan elevado de personas uno mismo, por ello hago una llamada a la originalidad que vive en cada uno de nosotros, en pensar uno mismo qué es verdaderamente lo que se puede cambiar en un sistema educativo aparentemente normal.

Y es que profesores castigan en cuanto se mira por la ventana.- ¡No pienses!- Solo les falta por decir. -¿Y por qué cortar un pensamiento?- Les digo yo.- Cortar un pensamiento es como cortar agua, inútil.-. Y aquí nos encontramos, aprobando leyes medievales en contra del aborto, y votando a aquel que te sigue cortando.


Véase: Richard David Precht

Introducción al Blog

Soñadores del Zulú... ¿Por qué?

En la lengua Zulú, Zulu significa cielo y a su vez firmamento.

Todos, o por lo menos la mayoría de vosotros conoceréis al pueblo Zulú, un pueblo que surgió de otros diferentes poblados africanos, que tuvo que soportar luchas internas crueles durante años, y más tarde, con la llegada de los británicos mantuvo un papel importante en la formación de Sudáfrica. Un pueblo salvaje que se camufló en el apartheid, pero al que finalmente devolvieron sus derechos. El pueblo Zulú es para mi una perfecta representación, o un ejemplo un tanto exagerado del ciudadano de ahora, firme y fuerte pero sin voz, sobre todo soñador, pero también luchador.

Debo admitir que soy un dormido, que cuando pienso sueño en plena luz del día. En las entradas de mi blog escribiré diariamente, si me es posible, pensamientos cualquiera, textos, relatos, microrrelatos, ideas, pero también poemas. Intentaré buscar mi propio estilo, plasmar mis pensamientos en papel, o más bien en pantalla.

Si les digo el qué es lo que me impulsó a escribir en este blog les diré que fue un buen amigo el que me llevó hasta aquí, sobre todo gracias a su insistencia. Pero también la curiosidad me impulsa, tanto como hacia muchas otras cosas. Y como dijo Azorín, en una frase que muchos apoyan, alejándonos de su orientación política: "La vejez es la pérdida de la curiosidad".

Y como soy curioso, me mantengo joven y sueño con viajar y vivir cosas nuevas, recorrer el mundo simplemente con una mochila, guitarra, bloc de notas y cámara. Por otra parte también es la curiosidad la que me mantiene sedentario y la que refuerza mi interés en la política, la literatura, etc.

Suelo dedicarle tiempo a pensar sobre asuntos relacionados con la política, también en leer periódicos y libros, por ello mis textos siempre intentan contener un tono crítico con algo.

Llevo ya tiempo escribiendo para mi mismo, y ahora quiero compartirlo. ¡Espero que os guste!